Además de ser un auténtico manjar, resulta ideal para incorporarlo en tu dieta. Y es que las numerosas y beneficiosas propiedades del queso de oveja para tu salud lo convierten en un alimento nutritivo y sabroso a partes iguales. Sigue leyendo y descubre por qué no debe faltar nunca en tu hogar.
Fuente de proteínas
Las proteínas son básicas en una dieta rica y variada. De hecho, son imprescindibles para el desarrollo de la musculatura. El queso de oveja manchega contiene una gran cantidad de ellas, 32 de cada 100 gramos, nada menos. Sin embargo, cuanto más curado sea, mayor cantidad de calorías posee, por lo que tampoco se debe abusar de su consumo.
Aporte de calcio
Esta propiedad general de los quesos se acentúa en el caso de los de oveja. De hecho, según la Fundación Española de Nutrición, se trata de un alimento perfecto para aportar una gran cantidad de calcio en poco volumen de alimento.
Esta sustancia es indispensable para la formación de huesos y dientes, por lo que beneficia especialmente a lo niños.
Otros minerales clave
El magnesio o el zinc son minerales esenciales para el organismo, pues previenen problemas como la osteoporosis o la anemia. Y lo cierto es que entre los beneficios del queso de oveja destaca el de aportar una buena cantidad de estas sustancias.
El calcio, el zinc y las proteínas son algunas de las sustancias que potencian las beneficiosas propiedades del queso de oveja.
Menos lactosa
Una menor cantidad de lactosa (sobre todo en los quesos más curados) deriva en menos problemas digestivos tras su ingesta. Además, hay que tener en cuenta que la leche de oveja es, incluso en su forma líquida, menos pesada que la de vaca.
Después de saber que, aparte de ofrecerte un sabor sin igual, las propiedades del queso de oveja hacen de esta delicia procedente de La Mancha sea buena para tu salud, ¡no querrás que te falte nunca en casa! Comparte este artículo en tus redes sociales para que tus amigos conozcan también todo lo que puede aportarles.
Hoy hemos estado visitando la quesería con nuestras hijas y se lo han pasado fenomenal, han visto como se elabora un queso artesano. Han hecho su propio queso, jugado con los animales y participado en los diferentes juegos que tenían preparados. Y hemos terminado degustando los quesos que elaboran, que por cierto están buenísimos. Un día estupendo. Muy recomendable.